domingo, 23 de marzo de 2014

Comentando a Victor y su experiencia con las Marcha de la Dignidad

Que gusto da de vez en cuando pillar esta sección del blog y desfogarme un poquito. He tenido un fin de semana movidito, quedada con los chicos, varios trabajos de la uni, otra semimudanza y todo el tema de las "Marchas por la Dignidad". Hace un par de años hubiera estado en todo el fregao, pero ahora la apretada agenda y los horarios de la diálisis me hacen ver los toros desde la barrera, pero es el primer tema que quiero comentar.
Recomiendo la lectura del post de mi compañero Víctor: Mi experiencia sobre #marchadignidad22m, es una crítica respetuosa a lo que por desgracia pasa en casi cualquier concentración de gente, que por pura estadística siempre hay unos pocos con ganas de liarla. Lamentablemente esos pocos empañan la intervención pacífica de unos cuantos miles. Coincido plenamente con Víctor en que necesitamos ser mejores ciudadanos para cambiar las cosas, y a pesar de que siempre he estado en todas las que he podido, defiendo que las manifestaciones sirven para poco o nada en este país. En otros países los políticos se acojonan si salen 50000 personas a la calle; aquí como si sale un millón. Si a eso le añadimos que somos muy de manifestarnos desde el sofá, pues que queda, que los exaltados con ganas de liarla acaban siendo hasta representativos. Entiendo por la experiencia que nos cuenta Víctor que la inmensa mayoría de los manifestantes pacíficos estaban ya en su casa, y que por lo tanto no había freno para los descerebrados (por desgracia el valor es contagioso, incluso para hacer el gilipollas), pero aun así los que tenemos la cabeza medio bien amueblada y de verdad queremos manifestarnos (en esta o en cualquier otra) tenemos que intentar no solo mantener las distancias con esa gente; a mi ya no me sirve el "es que son unos cabras sueltos", porque esos se cargan todo el esfuerzo que hacemos los demás. Debemos ser los primeros en decirles que no. Estoy seguro que de que yo he recibido mas porrazos y pelotazos que esos niñatos, y en la vida he tirado una piedra a un policía, me caerán mejor o peor, pero la violencia la dejaba para los campos de rugby, no para rebajarme a un sinsentido que no podía acabar en nada bueno (y en primera fila se oyen muchas barbaridades, ahí queda mi denuncia en el Defensor del Pueblo en la marcha contra el gasto de las JMJ donde escuche a un policía de rango dar instrucciones claras y precisas de atizar solo a los del lado "No católico" que por cierto estábamos super tranquilos). A mi sinceramente la idea de las marchas por la dignidad no me apasionaba. Ya he comentado que no creo en el poder de las manifestaciones, en parte porque nuestros políticos nos chotean y en parte porque hemos abusado tanto de ellas que han perdido efectividad, pero tampoco soy quien para juzgar o no que la gente se exprese como quiera. Quizás el nombre no era el más adecuado, ya que en cierta forma y siendo abiertos de mente, se puede interpretar que los violentos reclaman así su dignidad, no es mi caso, me debo de estar aburguesando ;). Por cierto que me encanta cuando Víctor habla de castas, como se nota que estudiamos políticas XD. Por desgracia es cierto que te tachan de facha si no te pones a destrozar cosas como ellos, pero es que a mí la opinión de cuatro descerebrados me la trae al pairo. Hace años, con la sangre mas caliente, eso hubiera sido peor que mentarme a mi madre, ahora les podría dar una lección acerca de que su actitud se acerca muchisimo más al fascismo que la de incluso (y me arrepentiré de decirlo) alguno de los habitantes que pululan por Génova 13. Resumiendo, que me estoy alargando mucho, es cierto que tenemos que ser mejores ciudadanos, pero esto exige implicación no ver los toros desde la barrera. Y cada uno se implica como puede o quiere. Yo intento ayudar a otros enfermos renales con el blog, es mi forma de cambiar las cosas ahora. Antes organizaba actividades para los chavales. No es necesario ni meterse en política ni ir a manifestaciones para eso. Todo es querer y poner tu granito de arena. 

1 comentario:

  1. Muy buena entrada, David. Estoy de acuerdo contigo en todo en general.
    Está claro que con sensatez las personas se pueden poner de acuerdo y alcanzar fácilmente puntos en común.

    Lo que no sé es si hay mucha sensatez estos días... Y sí es cierto que veo un clima divido e intolerante entre la población en general...

    En cualquier caso, espero que sigamos de vez en cuando con estos debates! jajajaj.

    Un saludo!

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